..ella podría haber dormido una siesta, pero decidió que hacía un hermoso y luminoso día, propio para tirarse sobre un verde césped, chapata jamón y birra en mano.
decidió que no, que no siempre llevaba la contraria, solamente le gustaba, como a los salmonetes, a ratos ir a contracorriente.
no buscaba provocar. buscaba otros caminos, otras vías para comprender, para descubrir todo lo que se escondía tras las esquinas.
aprendía a sortear rotondas intentando empaparse en el camino y sin perder nunca la sonrisa.
miércoles, 17 de octubre de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario