el chamán y la que camina sin rumbo.
la puta y la niña prepúber
la policía y el reo,
esa cívica ciudadana y la inmigrante sin papeles.
la sanadora y el virus que te invade,
la violadora y la doncella,
la que escupe palabras y la que recibe tus besos.
soy todo aquello que detestas
y aquello por lo que morirías.
ese violín que desgarra sus cuerdas provocando tus sensaciones,
esa música infernal que martillea tus entrañas.
soy todo y soy nada.
soy lo que decido en cada momento,
lo que ni tan siquiera adivino y mis prejuicios rechazan.
las viradas en el camino,
lo que no escogiste porque temías.
soy tu cara y tu cruz.
aquello que anhelas y de lo que huyes.
la verdad de este pequeño instante
en el que decides sumergirte,
empaparte,
o cerrarte, aislarte.
tus olas y tus mares en calma,
tus 'que te parta un rayo'
o esa sonrisa que te acoje y atrapa.
yo decido
en cada momento, a cada rato
lo que conviene o no.
los aciertos y las erratas,
mis uñas que arañan
o esas manos que abrazan,
los besos que regalo,
o aquellos por los que te cobro.
mi cuerpo que se ofrece
o la boca que niega.
soy tu quietud,
tu incertidumbre.
la lotería que ganaste,
o aquel caballo por el que nunca apostaste.
esa música que escuchas,
esas notas que te incitan y que bailas,
que cantas o tarareas,
la melodía sublime o tétrica
por la que te quieras mecer.
soy lo que ofrezco
y lo que te niego,
lo que acepto
y lo que rechazo.
el viento que te despeina
o que agita y bambolea las cuerdas de tu cometa.
la hamaca en la que descansas,
el vaivén que no te deja dormir.
todo en uno,
nada en mí.
lo que yo muestro y lo que escondo.
