martes, 12 de febrero de 2008

velas

sucede que a veces, esos mecheros débiles que normalmente no funcionan, pero que mantienes en primera línea de trinchera porque en los momentos clave te sacan del paso, empiezan a enviarte señales de su inmediata jubilación. quizá sea la última oportunidad, de, con el último aliento que te brindan, encender una vela. hay veces, como ahora, que el mechero está tan agotado de prestar servicio, que su llama se hace ténue, casi no tiene la mínima intensidad como para ceder su luz a la mecha de la vela. he insistido. he dejado descansar la mecha, el mechero, paciéntemente, con todo en mi mano para culminar la labor que me traía entre manos. al final, he conseguido prender la mecha. acompaño el petit relato con banda sonora....una, que de vez en cuando necesita pequeña dosis de ...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vaya, que casualidad. He empezando el día escribiendole a alguien un trozo de ... y lo acabo escuchando y viendo ...

Mi primer comentario pero... te sigo los pasos

Besos

Maca